ALGÚN QUE OTRO POEMA EN FORMA DE LLANTO

DANI: PARA TI QUE YA TE NOMBRO...

Para ti, que ya te nombro,
amor mío –y ahora hablo en serio-,
para ti, sol de los días
y noches, maravilloso
gran premio de mi vida,
de toda una vida, qué puedo
decir, ni qué quieres que escriba
a la puerta de estos versos.

Especialmente a ti, a esa amiga,
compañera de viaje
amante sincera,
pecadora en mente como yo,
que incluso se avergüenza
de los palos que no dio,
señorita en una estrella
que una mala conciencia escribió
cierto fracaso de amor
con una puerta que no cierra,
fundida en un rubor
de una lágrima de tierra.

De todas las historias de una historia,
sin duda la más triste podrá ser la nuestra,
porque termina mal. Si tú te empeñas.
Como si el hombre, harto ya de luchar con sus demonios,
decidiese encargarles el gobierno
y la administración de su pobreza,
su famosa e inmemorial pobreza
cuyo origen se pierde en las historias
de triste precio pagado en mil siluetas
a esos tristes demonios difusos en su conciencia.